Planificación cierre contable y fiscal de empresas y autonomos

Ya estamos en el último mes del año. Un mes en el que es imprescindible realizar una estimación de cara a los impuestos que vamos a pagar en 2018, tanto si somos empresa como autónomo. También servirá para reflejar cuál es la situación patrimonial en la que se está. Para evitar futuros problemas, os contamos cuáles son los aspectos a tener en cuenta para la planificación del cierre contable y fiscal para empresas y autónomos, ahora que todavía estás a tiempo.

Ten en cuenta que una correcta estimación de los resultados de nuestra actividad o de lo que hemos ganado este año, nos ayudará a tomar las medidas necesarias antes de que este finalice. Y este paso, además, nos puede suponer un importante ahorro el año que viene. ¡Toma nota!

Cuáles son los aspectos a tener en cuenta para la planificación del cierre contable y fiscal para empresas y autónomos

Aspectos contables

Aunque muchos aspectos contables son comunes. Para que quede más claro y más organizado, vamos a distinguir aquellas obligaciones y cuentas contables que es necesario revisar antes de final de año tanto por empresas como por autónomos. ¡Vamos a ello!

Empresas

En este caso tendremos que tener en cuenta la información que vamos a suministrar en las cuentas anuales y el impuesto sobre sociedades. Esta debe reflejar la imagen real de la sociedad respecto al patrimonio, situación financiera y resultados a finales de año. Por tanto, deberemos tener en cuenta las siguientes partidas contables:

Inmovilizado y amortizaciones contables

Revisar que hayamos incorporado todos los elementos de inmovilizado como tales, y no como gasto. Además, habrá que realizar la correspondiente amortización contable de manera correcta, usando las reglas contables y los límites establecidos para que nos podamos deducir el gasto en su totalidad, y no en parte.

Administraciones Públicas

Las cuentas correspondientes a impuestos y seguridad social deben ser revisadas cuidadosamente. Han de coincidir con la contabilidad, las liquidaciones de impuestos y seguros sociales, al igual que con los pagos efectuados a dichas administraciones. Por tanto, deberemos tener en cuenta que IVA, retenciones, pagos fraccionados, seguros sociales, etc. cuadran con lo contabilizado, pagado, y que lo que queda pendiente es lo correspondiente al cuarto trimestre o último mes en el caso de seguridad social.

Tesorería

Revisar que los saldos contables cuadran con los bancarios, para poder subsanar las diferencias con tiempo, si las hay. También se debe revisar el saldo de caja y comprobar que están contabilizadas todas las entradas y salidas del año.

Préstamos

Es necesario comprobar que estén contabilizados todos los pagos de los préstamos adecuadamente, tanto intereses como amortización, para poder deducir los gastos y reflejar adecuadamente el endeudamiento existente. También realizar la reclasificación de largo plazo a corto a final de año. Así, el pasivo será fiel a la situación real.

Acreedores y Deudores

Se deberá verificar que están contabilizadas todas las facturas emitidas y recibidas, así como los cobros y los pagos, para tener una imagen fiel de lo que la empresa debe y de lo que no ha cobrado.

Existencias

Es obligatorio hacer un recuento físico de existencias a final de año, y realizar el apunte contable correspondiente. Así se obtendrá una cuenta de resultados fidedigna.

Gastos de personal y remuneraciones pendientes de pago

Se debe comprobar que todas estas cuentas coinciden con las nóminas y lo que se le ha pagado al trabajador, de modo que el único saldo pendiente que quede sea el correspondiente al mes de diciembre.

Gastos o ingresos periodificados o aplazados

Comprobar si los hay y están correctamente prorrateados y contabilizados. Recuerda que no se puede declarar el total, sino la parte correspondiente.

Autónomos

En el caso de autónomos, se deberán revisar de igual manera aquellas partidas contables que corresponden a ingresos y gastos y facturas recibidas y emitidas. Por tanto, procede una revisión de todas las partidas contables descritas, excepto de aquellas que reflejan la tesorería, puesto que estas no son obligatorias. Aunque se deben controlar a nivel personal para llevar una adecuada gestión.

Aspectos fiscales

Una vez que hemos comprobado que todas las cuentas contables están bien, llega el momento de realizar la previsión fiscal, y ver qué se va a pagar en enero en impuestos, en la declaración de la renta y en sociedades, si corresponde.

Diferenciar la amortización fiscal de la contable

Este año existen diferencias significativas entre ambas, por tanto, habrá que adoptar las medidas pertinentes para poder deducir correctamente la amortización fiscal.

Comprobar cuáles son los gastos deducibles

Existen determinados gastos que, según el impuesto, no son deducibles. Es importante tenerlos en cuenta para planificar el resultado a pagar.

Estar al tanto de los beneficios, exenciones y deducciones fiscales

Es realmente importante hablar con el asesor para que nos informe de aquellos beneficios, exenciones y deducciones fiscales que podemos obtener para cumplir los requisitos establecidos antes de final de año.

Comprobar que importes están pendientes de cobro para ver si se pueden deducir

Existen plazos y deducciones, así como requisitos para aquellas deudas pendientes de cobro que sabemos que no se van a pagar. Por tanto, hay que tener claro cuáles son, e informar a nuestro asesor para que nos indique el procedimiento a seguir y que la pérdida no sea tan grande.

Tener en cuenta los gastos a deducir de los autónomos que trabajan desde casa

Recuerda que si eres empresario o profesional y trabajas desde tu domicilio propio, puedes deducir determinados gastos como comunidad de vecinos, IBI, luz, internet, agua, tasas, calefacción, etc. Siempre en la medida proporcional a los metros declarados como afectos a la actividad.

Estos son algunos aspectos generales a tener en cuenta para la planificación del cierre contable y fiscal de empresas y autónomos. Como siempre, aconsejamos que previamente se hable con el asesor para tomar aquellas medidas necesarias que nos ayuden a reducir la factura fiscal.