La nueva ley de start-ups aprobada en España viene acompañada de importantes novedades. En el aspecto de las deducciones fiscales, destacan la reducción de hasta un 15% en el impuesto de sociedades durante los cuatro primeros años de actividad, una deducción de inversión de hasta un 50% en los primeros cinco años y una inversión libre de impuestos de los primeros 100.000 eros. Veamos en mayor profundidad estas y otras cuestiones.
En cualquier caso, este es un Anteproyecto de Ley recién aprobado que se centra en el ecosistema de empresas emergentes y que ha recibido el nombre popular de ley start-ups. En el mismo, básicamente, se aplican ampliaciones de deducciones fiscales en el campo de los planes de acción, en la inversión y los nómadas digitales, tal y como el sector reclamaba.
La nueva ley de start-ups
El texto acaba de ser validado en el Consejo de Ministros. El mismo se ha encargado de recoger diversas demandas históricas del sector, pues ha visto la luz tras consulta pública para reformular, según se afirma desde el Ministerio de Asuntos Económicos, las partes más ambiguas de su exposición.
Por ello se introducen diversas novedades y modificaciones. Las conocemos.
Modificaciones en el texto
Se ha modificado la definición de start-up, para que los emprendedores que hayan creado varias empresas se puedan acoger hasta tres veces a esta ley que va a reducir hasta el 15% del impuesto de sociedades durante los cuatro primeros años de cada empresa, pudiendo también aplazar pagos en otra clase de impuestos durante al menos dos ejercicios.
Ahora, además, la certificación que demuestra que una empresa es considerada start-up se puede hacer a través de la ventanilla única. Está gestionada por Enisa y por la Oficina Nacional de Emprendimiento a recomendación de la CNMC.
De la misma forma, el anteproyecto recoge un límite clave de stock options libres de impuestos. Antaño se limitaba a 12.500 euros, pero ahora pasa a 50.000 euros. Y es que los tenedores solo tienen que devengarlas una vez las liquiden.
Las claves en la fiscalidad nueva de las start-ups
En lo que a fiscal se refiere, los primeros 100.000 euros de inversión ahora están libres de impuestos incluso para el emprendedor en sí.
Posteriormente, también se incluye una deducción del 50% por inversión durante los primeros cinco años de la empresa. Este tiempo se sube a siete años si la compañía es biotecnológica.
También se incluyen exenciones para los inversores que no residan en nuestro país. Para ello, con su número fiscal o NIF, sin necesidad de NIE, podrán invertir sin problema alguno.
Igualmente existe un compromiso firme de poner en marcha sandbox regulatorios. A ello se suman los entornos regulados que facilitan las probaturas de innovación en el sector. Es decir, mecanismos que, igual que pasa a nivel financiero, facilitan el contacto con el sector.
Constitución digital de empresas
A partir de ahora, toda start-up puede constituirse de forma enteramente digital. Para ello, podrá establecer sus estatutos tipo, con todo terminado en seis horas como mínimo, y cinco días como máximo en caso de optar por estatutos personalizados.
También se eliminan los requisitos de renovación del sello de start-up, suprimiendo aranceles notariales a empresas emergentes que, igualmente, pasan a estar exentas en la obligación de ir a concursos por pérdidas.
Se exime, además, la cotización como autónomo del emprendedor que trabaje por cuenta ajena durante las etapas iniciales de la formación de la empresa, por lo que ya no se ve sometido a doble cotización.
Otras ventajas
También se van a encontrar otras ventajas interesantes, como la agilización de visados para los considerados nómadas digitales. Se refiere el término a extranjeros que vengan a trabajar en una start-up española, ya sea como autónomos, o bien como emprendedores. Igualmente se va a facilitar el regreso de españoles a nuestro país para entrar al servicio de una start-up en suelo patrio.
Además, también se pondrán en marcha visados específicos para aquellos perfiles relacionados con las start-ups, de forma que tengan una fiscalidad más favorable, incluyendo menores tipos impositivos.
Se prevé que estas deducciones fiscales que establece la nueva ley de start-up entren en vigor una vez sean aprobadas, lo normal para mediados de 2022, se espera que en verano. Si quieres saber más sobre ello o cómo beneficiarte de estas rebajas, no dudes en contactarnos.